En la localidad de Las Palmas, en la provincia de Chaco, la Corriente Clasista y Combativa lleva adelante el Proyecto No’Oxonec, que se dedica a la producción de algodón de frontera, por cuarto año consecutivo. Esta iniciativa busca recuperar las tierras para la producción agroecológica en territorios donde la agricultura industrial y las políticas neoliberales han dejado de lado a los productores locales.
Este año, el grupo cosechó más de 600 kilos de algodón agroecológico, cultivado sin la intervención de patrones, de manera completamente comunitaria. Cada kilo cosechado no solo es un resultado de la dedicación, sino un acto de resistencia frente a la desindustrialización y el abandono de políticas públicas hacia los pequeños productores.
El grupo está conformado por 20 personas, muchas de las cuales son beneficiarias de programas como la Renta Mínima Progresiva, en combinación con ayudas municipales y otros como Potenciar Trabajo. Sin embargo, el gobierno nacional anunció recientemente el desenganche de estos programas del Salario Mínimo, lo que pone en riesgo la estabilidad de las familias que dependen de estas ayudas para subsistir y seguir adelante con su trabajo comunitario.
Tras la cosecha, el algodón será transformado en hilos y telas para la confección de indumentaria para bebés recién nacidos, lo que demuestra la capacidad productiva local y la fuerza de la autogestión. Este proceso de industrialización en pequeña escala no solo promueve la economía local, sino que también muestra el potencial de los movimientos sociales para generar soluciones concretas a la crisis social y económica.
Este trabajo, realizado en condiciones extremadamente difíciles, cuenta con el apoyo técnico de organizaciones como la Fundación Carrillo, el grupo Gualok, la APPCh, el INTA, y el municipio local, que brindan su apoyo en todo el proceso productivo. Sin embargo, la visibilidad de estos esfuerzos sigue siendo limitada por las políticas gubernamentales que no reconocen ni apoyan adecuadamente el trabajo genuino de los movimientos sociales.
Este es un claro ejemplo de cómo, en territorios como Las Palmas, los sectores populares luchan por su derecho a trabajar, a producir y a salir de la crisis sin depender de las políticas asistencialistas que recortan y ajustan continuamente los recursos destinados a los sectores más vulnerables. Estos movimientos sociales no solo exigen respuestas políticas y económicas, sino que demuestran, con hechos, que son los verdaderos trabajadores que buscan una salida a la crisis con propuestas de soberanía, justicia social, federalismo, tierra, techo, y trabajo.
Corriente Clasista y Combativa Las Palmas
CCC Nacional
Federación Nacional Campesina
Partido Comunista Revolucionario – PCR